La experiencia de sorprenderse es, sin duda alguna, algo maravilloso. En el estado permanente de sorpresa, tenemos al máximo todos nuestros sentidos, toda nuestra atención.
¿Recuerdas cómo de pequeño te sorprendías con cualquier cosa? Sorprenderse es ejercitarse en el arte de vivir en el ahora, de estar en el más inmediato y único presente.
Cuando vivimos sorpresa, observamos, aceptamos y aprendemos rápidamente. La mente está en silencio y no interfiere nuestra percepción (ver la atención para la autorrealización).
Por tanto, la sorpresa es espiritual, es sagrada, te lleva a tu Centro. Y esto viene reflejado en el Tarot.
El Loco del Tarot
¿Qué es la vida? Una sorpresa, una sorpresa constante, idas y venidas impredecibles.
Esto nos lo enseña el Arcano Mayor del Tarot El Loco.
Todos somos Loco, no sabemos que va a pasar en el instante siguiente. Todo es una sorpresa, aunque queramos creer otra cosa. La vida es un imprevisto en sí mismo, y nuestra posición ante esto es la de ser unos caminantes, como El Loco.
El Loco transita por senderos sin saber realmente adónde ir. ¿O acaso tienes tanto ego que sabes dónde va a finalizar tu viaje emprendido?
Nunca la meta es igual a como uno imagina. Es más, no hay meta, no existe, sólo es un nuevo punto de partida.
Todo esto te lo enseña El Loco cuando lo estudias y lo comprendes y lo sientes. El Tarot Terapéutico revelando secretos de la vida. La vida es un devenir, y sólo somos unos locos.
No hay nada que agarrar, porque no hay nada a qué agarrarse.
Por eso, cada vez que nos sorprendemos, estamos vivos, vivimos en El Loco.
Si no nos soprende ya nada, estamos muertos, El Loco ya no camina, no siente el impulso de moverse. Mala cosa 🙁
La sorpresa como mecanismo pedagógico
He aquí un texto escrito por Sesha, maestro en filosofía Vedanta-advaita y no-dualidad, acerca de la sorpresa.
«Es bien sabido el profundo nivel de atención que los niños ofrecen a todas las cosas que experimentan. Es tal su capacidad que logran aprender varios idiomas en algo más de tres años, eso sin contar su desarrollo en los restantes ambientes de la vida.
Los pequeños poseen la maravillosa capacidad de la sorpresa. Responden ante ella de manera sencilla; basta que un evento sea lo suficientemente halagador para que todo su sistema inmediatamente se aboque a él. Incluso después de un golpe que produzca dolor, algo entretenido es capaz de llevarlos a su inmediato olvido gracias a que la atención se desplaza totalmente al suceso naciente.
La continua sorpresa con la que los niños observan el mundo los lleva a la permanencia en un “presente” continuo. Nosotros solemos perderlo al crecer, al reemplazar ese “presente” continuo que ellos advierten por la momentaneidad de instantes pasados y futuros.
Mientras la sorpresa opera no existe la duda; he aquí la gran clave pedagógica. Mientras la atención se aboca a un evento sorprendente muere el razonamiento y se establece un fugaz intermedio donde sólo hay comprensión sin que medie la razón.
La sorpresa es una forma de “presente”. El máximo acto pedagógico es crear un continuo de sorpresa; ello implica no solamente una expresión de ideas verbales, sino a veces el simple movimiento de una mano o el asombroso ademán de un gesto.
La naturaleza nos sorprende por su armonía, por ello la contemplación es un continuo acto de asombro. El aprendizaje es un acto de fugaz sorpresa, razón por la cual es un instante de Conciencia plena; allí el saber se expresa sin intermediación alguna. El asombro, razón de ser del nacimiento de la filosofía, es otro acto hermanado a la sorpresa; en él, el saber aparece como reconocimiento claro del universo que nos rodea.
Sería extraordinario que las escuelas del mundo promovieran la enseñanza a través del acto del asombro: educar a profesores a enamorarse de la enseñanza y transmitir con esa intensidad especial el Saber y el Amor, como fuentes excepcionales de presente continuo.»
Sorpréndete por cada cosa
Seguir sorprendiéndose viendo un amanecer, escuchando atentamente a alguien, o sintiéndose uno a sí mismo, es estar Loco, es decir, es estar vivo, ¡bien vivo!
No pierdas la ingenuidad del niño, esa mirada inocente que no juzga nada. Fíjate como el niño es impredecible, cómo encarna El Loco, porque está conectado con la vida, con la Fuente, es Vida.
El hecho de poder sorprenderse ante lo cotidiano de la vida depende del grado de inocencia y de apertura que tengamos.
También tiene que ver con el grado de humildad que llevemos dentro. Porque si no, si la mente está cargada, no percibimos ni flores.
Hace falta hacer un vacío que permita llenar el ánfora con distintas realidades, percibidas solo, en estado de pureza inocente. Y para ello, seguramente, habremos hecho un trabajo de investigación del ego, sin juicio, solo observando. Y después un ejercício de desapego con los hábitos que han quedado descubiertos y nos sobran por ser obsoletos. ¡Gracias a la nueva conciencia que pudo revelarse ante el vacío!
La capacidad de sorprenderse va pareja a la inocencia y a la frescura abierta a la vida. Cuando comenzamos a dar todo por sentado, comenzamos a morir por dentro. Supongo que por eso nos gusta viajar, por la posibilidad de romper esa rutina insconsciente.
Gracias José por el artículo y a Ana Arriola por su comentario. Excelentes 🙂
Y yo que pensaba que este post iba a quedar sin comentarios 🙂 Muy bueno el aporte de la humildad, Ana. El ego impide sorprendernos y vivir cada instante como único, pues «ya lo sabía» diría el ego.
Y muy bueno el aporte de «cuando comenzamos a dar todo por sentado», Juan. ¡Y cuántas veces hacemos eso! De hecho, es común ver ancianos que no son capaces de admitir una idea más, de ver un detalle sutil más en el día!
La sorpresa como pedagogia, el acto de sorprender con algo nuevo, con algo que nos llama la atencion y nos desconecta de nuestra voz en OFF. Si esos y esas docentes abundaran no solo los niños aprenderian mas y mejor si no jovenes, adultos y mayores, ya que tanto la educacion formal como la no formal reune frente al o la docente miles de alumnos cada dia. Los habitos y la monotonia de los mismos nos impiden sorprendernos ante cada experiencia, conversación, imagen, etc. La tele intenta sorprendernos y llamar la atencion de sus televidentes con mas «morbo» o mas «basura», pero todo pasa y todo lo vemos como mas de lo mismo. Vivamos Sorprendidos, Atentos Presentes que sean los niños nuestros «Modelos»
Que sean los niños nuestros «Modelos»… Ellos sí viven bien despiertos…
excelente!!!!! me regocije con la lectura!!!!! coincido totalmente -es que son los niños que nos acercan a la esencia!!! mis nietos me sorprenden y transportan a diario a la Verdad a la Alegria y al Asombro!!!!!! Gracias
Además del excelente artículo, yo me sorprendo con las respuestas: Ana, Juan, José… Todos, me han dejado en minutos de meditación, es como cuando miro un río correr. Corre, corre y corre y no se acaba nunca (lo sé, el ciclo hidrológico, etc.), y me digo, apartando lo aprendido: «es maravilloso, miles de años y él sigue corriendo». Por eso aprendamos y apartemos luego el conocimiento y demos paso a la sorpresa. Gracias
Exacto Pedro. Es más, diría que la vida misma es una sorpresa, que si la observamos nos sorprendemos 🙂
Se me ocurre recomendar a quien no lo haya leído el Libro «El poder del Ahora» Y por supuesto ponerlo en práctica. Es la llave maestra que nos conduce a un estado radiante de felicidad y alegría naturales. Los niños lo hacen de manera natural, los que nos habíamos perdido en nuestros «problemas» y nos habíamos confundido con tantas cosas. Podemos salir de «ahí» y ser….»Como niños..¡¡¡»
Un abrazo a todos..¡¡
A vivir el instante presente…¡¡¡
Hola Eufe. En Sermasyo también tienes una referencia a Eckart Tolle en la entrada Eckhart Tolle y el poder del ahora. Es una maravilla ver como el niño sólo vive el ahora presente, ¿verdad? Un abrazo.
Me encantan tus artículos, José Ignacio, se nota que entiendes de lo que hablas y además te gusta, es difícil encontrar información así en este mundillo.
Saludos!
la vida es sorprendente , justo hoy cuando iba en el camión viajando aun evento como yo soy mimo y ayer tuve un ensayo de teatro pero me decía mi compañero falta sorprenderte emocionarte!!! y días anteriores me decía los mismo y yo sentía que no me emocionaba! (?) llego la conciencia y me doy cuenta que siempre estuve consiente comprendo y me emociono tanto ala vez que la vida siempre acaricia a esta niña y a los demás niños siempre los da amor aveces con tantos problemas falsos la gente se vuelve triste., siempre tenernos presentes y tener presentes todas esas señales porque somos un símbolo que radia toda esa fuerza humilde como la de la luna y el sol … vivamos no los quedemos agarrados del clavo que tarde que temprano se safa de la pared. saludos a todo y sean felices hay muchas inspiraciones!!1 🙂