En general y desde donde soy consciente, los tres Planetas Espirituales aportan a mi vida extraordinarias cualidades positivas que me llevan a interpretar y valorar las circunstancias con una mayor amplitud de comprensión y tolerancia.
Siento que me ayudan a despertar.
En ocasiones, me doy más cuenta de ello que en otras; sin embargo, pasado un tiempo puedo contemplar con asombro que la finalidad de lo vivido obedecía a un propósito MAYOR… y fuera del control de la personalidad.
La energía de estos Planetas está muy presente en mi vida.
Así, siento a:
Urano
Dándome la idea de cómo conseguir vivir en un mundo mejor, tanto en las relaciones personales, como en la enseñanza con los grupos con los que trabajo. La apertura y entusiasmo por “las nuevas filosofías” nació conmigo.
Y es tan solo que, hace unos pocos años pasé por “el descubrimiento” de que esos ideales eran de pequeños sectores “hippis” con una visión del mundo utópica. Esta “decepción” hizo que con el tiempo desarrollara una percepción de las cosas y situaciones diferente: más realista y tranquila.
Comprendí con una visión más amplia que, todo era perfecto como estaba porque obedecía a un Orden Superior de aprendizaje para el Alma.
Que mi visión reducida solo esperaba que todo fuera paz, armonía y belleza, sin poder llegar a contemplar que la evolución de la Vida se origina a través del movimiento que aporta la Consciencia para resolver las dificultades.
Y a pinceladas de intuición, fui potenciando una creatividad más efectiva, aplicada al momento y a las circunstancias presentes, tanto en los grupos como en la vida personal.
A esta casi reciente nueva visión, la estoy infinitamente agradecida porque aportó serenidad y aceptación a mi mente y una asombrosa capacidad de encontrar recursos alternativos ante situaciones inesperadas, sin cuestionarme soluciones “más ideales” que las surgidas de manera espontánea, en cada momento.
“Está bien tal y como ha sucedido, para poder ver…”
Neptuno
El cambio de “visión de las cosas” que URANO produjo, afectó directamente a mi concepto sobre el amor. Dentro del mundo perfecto, entraba inevitablemente, “las relaciones perfectas, las soñadas…”
Aquí, aunque la sacudida de valores fue impactante, también es cierto que fue más rápida la comprensión. El dolor abrió mi Conciencia y el desapego me ayudó a entender que la felicidad no provenía del exterior… ni de nadie.
Que todo en la vida es transitorio y que el verdadero Amor comienza por el cariño y respeto hacia uno mismo. Y que desde ahí, desde las necesidades afectivas cubiertas por la propia energía espiritual, por el propio SER, podía relacionarme para compartir incondicionalmente, sin esperar que alguien viniera a llenar los vacíos de mi propia desatención.
Entonces pude observar que el sentimiento de abandono, tan ampliamente vivido, estaba generado por la creencia del miedo a que me dejaran, a que la “estabilidad emocional” que aportaban las personas que compartían mi vida, se fueran. De él o de ellas, dependía mi bienestar.
Este encuentro con una visión más amplia del Amor, sucedido en la casa 8, me potenció la capacidad de comprensión, tolerancia, compasión y perdón.
Aprendí que, cada uno desde nuestro nivel, sólo podemos actuar como lo hacemos. Que todo es adecuado y correcto. Y desde este peldaño de experiencia ineludible, poder ascender con la sabiduría asimilada, hacía el siguiente escalón.
Esta enseñanza había de ir acompañada de la Aceptación y del Amor hacia uno mismo y hacia los demás.
Pareciera que todos los cambios importantes tuvieran que atravesar el umbral de la desnudez, antes de poder conocer la inocente lección que guardan.
Plutón
No sé realmente por qué, pero me encanta la energía de este Planeta, que sufro y disfruto a la vez. Es como el enlace en donde el pasado y el futuro encuentran coherencia en la complicidad del cambio presente.
Le puedo percibir claramente como la imagen de un anciano Maestro, nutritivo y sabio, sin que por ello deje de orientarme, corregirme y ensalzarme los aciertos y errores. De lanzarme al continuo cambio y al desapego, a la búsqueda y al encuentro con lo nuevo.
Desde El, desde “el guía espiritual” que muestra la humildad y la transitoriedad de las cosas, puedo entender mis frecuentes descensos a “los infiernos” para encontrarme con aquellas partes de mí que han de ser sanadas, abandonadas… restablecidas.
Es a través de la intensidad del sentir, del profundo silencio interior, de la soledad que todo lo envuelve en una Nada sin principio ni fin… que transmuto y renazco como el Ave Fénix, para salir de la bruma, de la espesura de la confusión, con una visión más clara, con un nuevo entendimiento del ser humano, de su finalidad y de mí misma.
Y es entonces que, la experiencia hecha aprendizaje en la fragua del dolor, (donde la muerte muestra su rostro) queda consumada.
En este resurgir aún convaleciente, puedo percibir la ligereza que produce lo abandonado en las cenizas de la transformación y la libertad que conceden pequeñas verdades más simples y Eternas.
Y como siempre, El me espera a la salida sin que por ello “Su presencia” dejara de acompañarme en los momentos de dolorosa conversión. Sin embargo, es después que le percibo, le siento fusionándose en Mí como una sola realidad, como una Única Esencia.
…Y entonces, el retornar hacía la Vida, mi vuelo hacía la Luz va impregnando de un mayor entendimiento y sabiduría cuya finalidad última no es la experiencia en sí misma, sino la de ser compartida.
El camino hacia las nuevas formas de ser y hacer aprendidas, queda a la vista…
Un cálido abrazo….
María Jesús Aguarón
Autora: María Jesús Aguarón, Naturópata, Psicoterapeuta y Astróloga.
Me he identificado mucho con tu evolución personal descrita en este artículo. Yo estoy, desde hace un tiempo, creciendo en los mismos puntos. Toda una lección y prueba…
Gracias.
Montse.
Hola!! Yo me identifico mucho con las energías de Neptuno por ser ascendente Piscis y Plutón por mi sol,luna,mercurio y neptuno en el signo de escorpio. Pienso que muchas veces esas transformaciones que se activan con los tránsitos son oportunidades que nos ofrece la vida para mejorar. Estoy viviendo actualmente el tránsito de Plutón cuadrado a mi venus natal y puedo decir que el darte cuenta que la única pareja que va a durar toda la vida contigo, eres tú misma es todo un descubrimiento. Plutón enseña, así sea a puros martillazos y Neptuno me mostró a través de la confusión de mi ex pareja, mi propia confusión.
No se…Tengo a Neptuno cuadrado al Sol creo que esto tiene que ver o puede tener que » ver » con.. que a veces no veo nada (?) claro, tengo la impresión de sufrir espejismos, soy como demasiado idealista, los asuntos de índole económica se suelen complicar..( Neptuno en II pero cerca de cúspide III, o sea : conjunto).Sé que hay un compositor con este aspecto y en las mismas casas y la verdad es que la música me apasiona.
Mi casa VII es Piscis y no se si mi Regente de VII es Neptuno o Júpiter en natividad diurna..- o ambos-
Saludos y felicitaciones por tan interesante espacio de intercambio
Hola María Jesús, acabo de pasar por la sesión completa de los transpersonales, estoy convalesciente, jejeje!
Lo describes muy bien, es bueno para uno mirarse en el espejo y reconocerse. Aunque no se vea, la compañía se siente.
Mi percepción es que somos muchos y seremos más. Siento el tiempo acelerado, vertiginoso. Sin embargo estoy en calma, segura del camino. Viene a mi mente alguien que camina erguido y sin apuro, va con una estrella en la frente.
Un abrazo
María Jesús: qué bellas expresiones! emocionada seguí la lectura, viendo como transmites tus vivencias y emociones más profundas. Comparto contigo el amor y respeto especial por Plutón, al que considero de una espiritualidad mayor, a pesar de su distancia física.
Ese «no sé porqué» que utilizas se confundió con mi exacto sentir. Sólo lo percibo así y lo sigo; él me lleva sin yo habérmelo propuesto, por el camino de la sanación tanto mía, como de aquéllos que reciben el Reiki que doy con todo mi Amor.
Desde lo astrológico, elegí el bucear en lo profundo, en las raíces, en lo kármico, anhelando ayudar a la transformación espiritual que todos necesitamos para evolucionar. Cariños y muchas gracias por tu escrito.
excelente apreciacion, en el analisis del diario vivir, aprendemos de las influencias de cada planeta, lo reconocemos, es astrlogia viva,
saludos,
Hace unos meses escuchaba aquellas miradas que aparecieron en el despertar, que se anclaron para entender que nada es lo que parece, para escuchar desde el cuerpo el proceso del universo y llegar hasta los planetas que componen el organísmo desde el que seguir adelante con la firme determinación de despertar a la verdad, a mi verdad, a la verdad de cada uno.
Gracias desde siempre para siempre, en el contorno de los límites que fueron traspasados para ver que el mundo no nos contiene.
Sé feliz,
Miguel José
hermoso gracias .. realmente me senti muy identificada…tengo un transito de urano por mi casa 7 al que aveces detesto…pero que bien descripto esta: EL DOLOR ABRIO MI CONCIENCIA … Y EL DESAPEGO ME AYUDO A ENTENDER QUE LA FELICIDAD NO VENIA DEL EXTERIOR…tuve que aprender de a poco lo que significaba llenar esos huecos vacios en mi vida…que las relaciones no son perfectas ni ideales…y que el verdadero amor comienza con el respeto y cariño a uno mismo…. gracias..exelente pagina….