¿Qué ocurre cuando la Astrología aparece en tu vida?
Cuando aparece o te acercas a la Astrología, se pone en marcha un proceso de aprendizaje.
Lo que es cada vez más habitual es que comienzas a estudiarla con la motivación de conocerte a ti mismo, y de comprender y mejorar tu vida.
Y entonces ocurre algo extraordinario…
La Astrología te enseña que tú también eres tu entorno, tus padres, el país en el que vives, el planeta que habitas…
Comprendes, en suma, que nada de lo que ocurre en el Universo es ajeno a ti, y viceversa.
Por eso decimos que la Astrología Psicológica y Transpersonal te pone en contacto con lo que realmente eres.
Donde quiera que dirijas la mirada, ahí estás tú.
Eso que captas (y lo que no percibes también), eres tú.
El problema es que no nos educan para ver las cosas de esta manera.
Por lo tanto, cuando estudias Astrología estás aprendiendo a ver el mundo (y tu mundo) de una forma totalmente diferente.
Y esto implica un desaprender muchas cosas que dabas por válidas pero que nunca te habías parado a comprobar.
¡Veamos todo esto con más detalle!
Soy yo y mis circunstancias
Tu realidad personal va mucho más allá de lo que nos han enseñado a percibir como persona, y esa es una de las primeras lecciones que te da esta forma de conocimiento que es la Astrología.
Pero no acaba aquí la cosa.
Si sigues profundizando, llegas a entender que no sólo todo está conectado con todo: a un nivel más profundo, todo está incluido en todo.
En cada partícula del Universo está reflejado el Universo entero.
“Yo soy yo y mis circunstancias”, dijo Ortega y Gasset, que para eso era filósofo. Piensa en todo lo que implica que tú estés aquí, en este momento.
Piensa en la cantidad inconcebible de carambolas cósmicas que tuvieron que darse para que tú puedas decir “yo”, y verás cómo ese yo se hace cada vez más pequeñito. Tan pocas cosas dependen de tu yo, empezando por tu existencia misma!
Pero te han enseñado que “yo” es fundamental, es lo más importante. El yo chiquitito, el personal, el que nos separa y nos diferencia de los demás.
Qué nos enseñan a ver y qué nos enseñan a ser…
Desde muy pequeño, en realidad, desde que naces, tu entorno te educa. Absorbes como una esponja todo lo que hay a tu alrededor, sin límites.
La mirada de un bebé es pura: percibe sin juzgar.
Se dice que “los niños dicen siempre la verdad”, y así es.
Cuanta menos “educación” posee la persona, más tenderá a expresar las cosas tal como las ve.
Según creces, te educan y te socializan. En otras palabras, te enseñan a ver el mundo de determinada manera, inevitablemente limitada y limitante.
Y es necesario que esto sea así. Porque no somos “seres naturales” guiados puramente por el instinto.
Vivimos en un núcleo familiar, primero, y social, después, donde existen unas normas y unas reglas que permiten que la convivencia sea posible. Aprender a respetar esas normas nos da unas posibilidades de supervivencia mayores que las que teníamos en la “vida salvaje”.
De modo que la educación y la socialización son necesarias. Porque nos permiten más y mejor comunicación con el grupo, y una existencia más placentera.
Aunque a veces lo olvidemos, la sociedad nos hace mejores: nos empuja a desarrollar habilidades y capacidades que, de otra manera, nunca explotaríamos.
Compara, si no, las posibilidades que tiene un chimpancé de satisfacer su curiosidad, y las que tiene un ser humano moderno.
La educación social que recibimos está orientada, en definitiva, a ser un yo en un grupo, con el fin último de optimizar nuestras posibilidades de supervivencia.
Los problemas personales comienzan cuando, por estar demasiado pendientes de sobrevivir, nos olvidamos de vivir.
Cuando, por un exceso de identificación con los valores, tradiciones y prejuicios del grupo, limitamos las necesidades y deseos que tenemos como seres únicos.
Cuando lo social acapara el espacio de lo individual.
La ignorancia nos convierte en seres insatisfechos
La educación que recibes está limitada por las necesidades de orden social, por una parte, y por la importancia que, como seres vivos, debes dar a tu yo, que es el mecanismo que nos permite percibirnos como individuos separados del resto, con la finalidad, por supuesto de sobrevivir y transmitir tus genes.
Lo social y lo individual ponen el marco y establecen, así, los límites (y limitaciones) de tu educación. Pero, aunque sólo sea a nivel inconsciente, sabes que hay más, que tú eres más. Y empiezas a experimentar el yo y lo social como obstáculo, como problema.
Entonces, puede llegar un momento en que no estás a gusto en tu entorno, y sientes que los valores del grupo no coinciden con los tuyos. Incluso, puedes llegar a sentir que operan directamente en tu contra.
Lo curioso es que todos, en algún momento, nos sentimos así.
Pero nos callamos por miedo a sentirnos bichos raros.
Pensamos que los demás no tienen, aparentemente, problemas con su entorno. Como si su educación hubiera sido tan eficiente, que no necesitan saber más y funcionan muy bien de esa manera.
Si la educación que recibimos es completa, entonces es culpa nuestra si lo que sentimos no coincide con lo que se espera de nosotros.
Es el momento de expandir los límites, de ver un poco más allá, y empezar a contarnos la película completa, sin esa censura rígida que impone el medio.
Aquí es donde se impone cambiar la mirada y ver más allá de lo que te contaron que era cierto.
El poder educativo y liberador de la Astrología
Por eso resulta tan liberador estudiar Astrología, por ejemplo, y descubrir que el mundo es muy diferente, y es mucho más que lo que te enseñaron.
Mientras permaneces en la ignorancia, sufres. Cuando descubres que hay más, que eres más, entonces comienzas a liberarte de los límites de tu educación.
Conocer es liberarse.
Todo aprendizaje consiste, en esencia, en educar la percepción.
Y eso es lo que hace la Astrología.
Sólo que no cambia tu percepción sobre una parte de la realidad, sino que le da un sentido enteramente nuevo y completo a la totalidad del Universo, y a tu lugar dentro de él.
Y eso es lo que la hace una ciencia tan especial…
A ti que estudias Astrología, ¿sientes cómo ésta ha cambiado tu percepción?
A ti que no la conoces, ¿te atreves a descubrir que el mundo se puede ver de una manera diferente?
Me gusto leerlo.
Gracias MariAngel.
Muy interesante entrada,
Ese eterno intento de balance entre lo interior y exterior, el yo y lo social, conocer hasta dónde llegar con las cosas…es algo que lleva toda una vida de aprendizaje; al menos yo lo tengo asumido así, el tema de superación personal, para no crearme estrés ni frustración innecesaria 🙂 es un viaje bastante largo y lleno de baches pero también de buenas sorpresas y beneficios. En mi caso, actualmente me hallo en esta situación de ponderar/sopesar necesidades, actitudes… tratando de equilibrar mi interior, equilibrando mi actitud exterior y viceversa.
Hablando de aprendizaje, quiero también dejarte Gustavo una pregunta puntual referente a los indicadores astrológicos de la salud que me gustaría saber desde hace tiempo; más concretamente: Hay algunos tránsitos en especial entre tal o cual planeta o tal o cual posición, que se sepa que producen un impacto directo en la salud?.
Vaya, se me olvidó mentar que cuando uno salta la valla impuesta por el mundo que nos rodea y se atreve a mirar más allá será más libre sí, pero a costa de sufrir la incomprensión y la visión más «estrecha» y convencional del resto, que siempre querrán imponer su punto de vista «universal» y desaprobar la crítica y el librepensamiento del individuo, para lo cual hay que tratar prepararse bastante o será una continua fuente de desaveniencias y sufrimiento personal…
A quién no le ha pasado que cuando encuentra el santo grial de su experiencia vital y cree estar posicionado en un buen punto de partida para una vida renovada de repente todo se le echa encima recordándole lo «equivocado» que está?. Abrirse a eso o no, para los que como yo tienden a reflexionar y a hacer autocrítica más de la cuenta, es un dilema casi continuo y no sabemos nunca qué camino tomar..
Resumiendo: Lo que nos hace sentirnos incómodos y nos produce daño esconde en su interior una enseñanza más elevada o sencillamente nos hacen daño para avisarnos de que las hemos de evitar a toda costa?.
Gustavo y compañía que opináis!
Hola, Sarah:
Con respecto al tema de la salud, sería necesario ver toda la Carta Natal, además de analizar tránsitos, etc, y de tener buenos conocimientos de Astrología Médica. De todas maneras, te recuerdo que en ningún caso la Carta Natal puede sustituir el diagnóstico de un profesional de la Medicina, aunque muchas veces puede ser muy útil para averiguar las causas no-físicas de una enfermedad.
Nos pides opinión sobre los daños e incomodidades de la vida. ¿Cómo lo veo yo? En primer lugar, creo que lo que está ahí siempre es parte de nosotros. Está ahí para vivirlo y reconocerlo como propio, no para negarlo ni combatirlo.
Esas experiencias que sentimos como desagradables, las «cosas malas» que «nos pasan», señalan la distancia entre lo que pide nuestro Ser y lo que quiere nuestra psique. Nos avisan de que no estamos haciendo lo que la energía nos pide, y nos llaman a lo auténtico.
Saludos!
Gracias, me siento identificada realmente cambia nuestra percepción de nuestro universo y nuestro lugar en él, da respuesta a muchas preguntas que a través de la astrología podemos resolver.
Hola Gloria,
La Astrología nos sirve como herramienta de autoconocimiento y desarrollo personal, pero también es una fuente de conocimiento metafísico. Nos enseña a mirar de otra manera que enriquece nuestra percepción del mundo.
Gracias por comentar!
Excelente Gustavo!
Muchas gracias, María Teresa. 🙂
Un fuerte abrazo!
Hola, que gran artículo Gustavo y que profunda reflexión! Da mucho que pensar… Personalmente desde que empecé a interesarme por la Astrología, mi forma de percibir la realidad ha ido cambiando y cuando me he decidido ha estudiarla más seriamente haciendo la formación en Sermasyo, pues realmente el cambio de percepción es muy grande…cuando la mirada cambia, la realidad cambia…a veces me siento como el niño que está aprendiendo a leer y que después de solo poder unir sonidos y sílabas, empieza a entender la historia que está leyendo…y es maravilloso… Gracias
Hola Juan,
Gracias por tu comentario.
Si la mirada cambia, la realidad cambia. Y la Astrología nos enseña a mirar todo con ojos nuevos. Por eso es tan transformadora y sorprendente.
Un abrazo!
Es muy interesante todo el artículo y los comentarios también enseñan.
Gracias!
Gracias, Olga, por comentar! Y me alegro de que te haya gustado el post.
Un saludo
Muy agradecida por este articulo tan interesante excelente
Muchas gracias, Jorgelina.
Un abrazo!
Hola Gustavo:
Felicidades por este sabio artículo tan profundo y sencillo a la vez, con el que he resonado completamente. Cuando hablabas del niño pequeño ¡Cuánto llaman la atención los bebés! la pureza que transmiten antes de contaminarse por tantas creencias y valores adquiridos. Lo cierto es que, sin hacer nada especial esos niñitos nos atraen, nos llaman la atención, desarman incluso al empresario más seco y serio que uno se pueda imaginar. Y es que son un espejo tan hermoso de nuestro ser más puro y original. Qué interesante desaprender y quitarnos todas esas capas adquiridas que han enmascarado el brillo de nuestra alma, y quedarnos con lo esencial de todo lo social, más allá de las formas y estructuras externas el ser permanece eternamente. Y qué maravilla la Astrología Transpersonal que paso a paso nos hace comprender con pelos y señales quiénes somos como seres particulares y singulares y de lo que nos tenemos que desprender o desaprender para llegar a ser quienes verdaderamente somos.
Gracias mil por este bello y sabio artículo.
Un gran abrazo
Hola Elizabeth,
Te agradezco mucho tus palabras, y me alegro de que te haya gustado el post.
La Astrología Transpersonal nos enseña sobre nosotros mismos, y sobre todo nuestro entorno. Nos enseña a mirar el mundo de otra manera y, cambiando nuestra percepción, también transformamos lo que nos rodea.
Un abrazo!
Hola, yo también me he sentido así, quizás por eso estoy aprendiendo Astrología. Pero tampoco identificaba bien lo que me pasaba tal y como se describe en el post, tal vez por lo que me enseñaron en el colegio y desde pequeño. Aprender Astrología me ha enseñado que hay más, y que hay cosas de nosotros y del mundo que no conocemos(y que no nos enseñaron antes).
Hola Óscar,
Gracias por tu comentario. La Astrología nos hace replantearnos muchas cosas, nos da una visión que nos permite percibir más allá de las apariencias, y ya no podemos ver el mundo otra vez de la misma manera.
Espero que nuestro blog te estimule para querer aprender más. 🙂
Un saludo!