Hablemos hoy de la psique.
O lo que es lo mismo, hablemos de las personas, de nosotros, de cómo somos, de cómo funcionamos, de cómo vivimos.
De ese misterio, de esa caja de sorpresas que somos.
Y lo haremos a través de una historia.
Una historia que tal vez sea la tuya.
Porque todos vivimos una historia parecida.
Y comienza siendo niños…
Tú o yo crecimos en un ambiente, supongamos que en una familia clásica para que el ejemplo sea más fácil (la historia es válida para cualquier tipo de familia, por supuesto).
Mamá es así, papá es así, los hermanos están siempre jugando y peleándose, etc.
Y en esa percepción del mundo pensamos —sin querer, de forma natural— que las personas deben funcionar de esa manera, de esa manera normal.
¿Por qué? Porque generalizamos: mamá es así -> todas las mamás son así. Papá es así -> todos los papás son así.
Sin embargo, poco a poco vamos descubriendo que no es así! Que hay personas que no coinciden con lo que podíamos esperar, que no son normales.
«La gente está mal…»
Ya en la misma familia vamos descubriendo con pronta edad que tenemos una tía «un tanto peculiar», que el abuelo se enfurruña vete tú a saber cuándo, y que la vecina le da por poner música heavy a las 12 de la noche (y no flojita, por cierto).
A medida que vamos ampliando nuestro círculo vemos más gente que podríamos calificar de… rara, que tiene unas costumbres muy distintas a las nuestras.
El colmo es cuando mamá nos cuenta que el primo, que siempre ha sido tan bueno, con 16 años resulta que se deja rastas y se va a vivir con una chica.
Y en algún rincón de tu mente te dices, ¿pero qué está pasando aquí?
Todos estos descubrimientos, fruto de tu observación, van calando en ti y vas conformando tu realidad 🙂
Y por supuesto, vas comenzando a grabar una vocecilla que dice: «la gente está mal». Esa vocecilla la reproduces cada vez que presencias una nueva escena que no te esperas.
¿Todo esto por qué sucede?
Porque somos así, es decir, porque la psique humana funciona así, por eso todos funcionamos de una misma manera, con unos mismos patrones de pensamiento que están detrás de las formas o apariencias.
La psique explica cómo vemos las cosas y cómo las llevamos adentro, cómo las codificamos.
Pero sigamos esbozando el percal antes de meternos en faena y sacar de la chistera el conejo de la Astrología…
Pasan los años y… cambiamos
Continuamos con nuestra historieta.
A la gente le da un arrebato y cambia, cambia radicalmente y nos sorprende. Esto es lo último que descubrimos gracias a nuestro primo.
Porque después de nuestro primo viene… ¡la vecina! que de la música heavy ha pasado a poner velitas en el balcón y hacer «meditación» (primera vez que escuchas esa palabra, por cierto, que suena como muy seria, «meditación» «¿Qué será eso?» te preguntas…)
Pero ahora viene lo mejor.
Resulta que no solo cambia la gente «de repente», sin razón alguna, sino que en un momento dado… ¡a ti te pasa lo mismo!
Te fijas en chicas, o comienzas a comprar libros de… —venga, fácil— meditación. Y claro, después de la meditación viene el reiki. Y el club de los poetas vivos, y…
Es decir, tú mismo te vas dando cuenta de que no eras el mismo de antes.
No llegas a decir que tú también eres raro porque te ha dado por no sé qué, pero casi. Más raros son los demás.
Y continúa tu vida por este camino apoyado en 2 raíles: la normalidad y la anormalidad.
¿Entramos en el mundo de la pareja?
Continúa nuestra historia y nos ennoviamos.
Y nos casamos.
Y convivimos con nuestra media naranja, que con el tiempo vemos que no llega ni a gajo.
Cuando pensabas que la conocías bien, ¡zas!, te sorprende.
Te sorprende de nuevo.
«Yo no me casé contigo» dices, intentando aliviar la tensión a través de una explicación insostenible.
Y ahora te acuerdas de tu primo con las rastas… y de la vecina que vete tú a saber dónde estará ahora y qué estará haciendo («a lo mejor se ha iluminado» piensas).
Aseguras a estas alturas que la normalidad no existe, que eso es una pamplina que te vendieron.
Y en este carrusel de emociones y desequilibrios mentales vas al psicólogo para encontrar un poco de orden y de paz en tu vida.
¿Qué te encuentras?
Un psicólogo que te hace unas preguntas muy raras el primer día…
Decides continuar unas sesiones más, y el resto de la película te dejo que la completes 🙂 (en el espacio de comentarios puedes redactarla libremente!)
Bienvenidos al mundo de la psique humana
¿El mundo está loco?
¿La gente está mal?
¿Soy yo quien está mal?
¿Qué está pasando?
Cuando te das cuenta de que todo tiene una explicación, y que tiene nombre, llegas al máximo de la curva ascendente.
La explicación se llama PSIQUE.
La psique es la madre del cordero, y la de tu primo, y la de tu tía, y la de aquella vecina, y de ti!
La psique es la gran desconocida.
Y por ser desconocida la tildamos de rara en cuanto se sale de lo que pensábamos que era lo normal.
La psique es lo que nos vuelve locos.
(Somos psique dicen los filósofos y estudiosos del Alma humana, pero esto ya para otra ocasión)
¿Es posible entender esto a nivel astrológico?
¿La Astrología puede explicar eso que hizo tu primo aquel día?
¿La psique puede ser observada a través de los ojos de la Astrología?
Veamos.
La Astrología explicando lo que no entendemos (de la psique)
Para centrarnos, lancemos una pregunta concreta.
¿Por qué unas veces somos de una manera y otras veces somos de otra?
Los animales se comportan siempre de la misma forma. Son sota, caballo y rey. Predecibles.
Nosotros, los seres humanos, tenemos una psique individual, con una mente más evolucionada que la animal (bueno, no siempre) que hace que todo sea más complejo.
¿Por qué cambiamos? nos estábamos preguntando.
La Astrología Psicológica y Transpersonal tiene como finalidad conocer nuestra psique y acompañarla en su Realización. Conocernos y favorecer Eso que somos. Por tanto, debe tener alguna respuesta a estas preguntas.
Desarrollemos algunas respuestas.
a) Tránsitos, Revolución Solar, Ciclos astrológicos…
De forma muy sintética, el hecho de que vayamos cambiando con los años es porque se van despertando nuestros Planetas y áreas de nuestra Carta Natal progresivamente.
Los Tránsitos, por ejemplo, son técnicas astrológicas de prognosis que nos muestran la evolución que cada uno de nosotros vamos viviendo en el tiempo.
¿Te das cuenta?
Y si lo explica quiere decir que nada es por casualidad.
¡La grandeza de la Astrología ante nosotros!
Lo que podemos considerar ilógico, irracional, sin explicación alguna, la Astrología lo ubica y nos calma diciendo: «Mira pequeño, ahora te pasa esto porque estás viviendo esto…»
Esto es oro.
Los Astrólogos somos mineros, buscadores de oro. Nos encanta el oro. Tras examinar la zona y hacer los sondeos pertinentes llegamos a encontrar oro.
Pero esto no se acaba aquí.
b) Lo vivido en la familia y sus consecuencias
Es habitual tener partes de nuestra Carta Natal que están más activas que otras.
Ejemplo.
Tus padres tienen un restaurante y tú te crías dentro de ese ambiente.
Lo normal para ti es ver a más de 100 personas al día, cada una con su timbre de voz, su expresión facial, sus manías, sus encantos, etc.
En el restaurante siempre está puesta la televisión, y si no, la radio, y si no ya la pone la gente con sus voces.
Ruido omnipresente.
Se entrecruzan las conversaciones y en un segundo puedes pasar de una mesa a otra en la que se hablan de temas que no tienen relación alguna.
¿Qué ambiente es este a nivel astrológico?
¿Qué energías están presentes en el restaurante?
La primera que me viene a la mente es Mercurio y Géminis, equivalentes tanto en cuanto Mercurio rige Géminis.
Todo es un «de aquí para allá», movimiento, contactos rápidos, ágiles, espontáneos, a menudo con humor.
Que si el menú del día, que si las compras, que si comprueba que en la despensa hay suficientes latas de atún (de las grandes) no vaya a pasar lo que pasó la otra vez, que si el repartidor se retrasa, etc.
Entonces, ¿qué parte de tu Carta Natal va a estar fomentada de manera natural si has vivido toda la vida en ese ambiente?
Bingo, tu Mercurio y tu Géminis, el de tu Carta Natal.
De hecho, es probable que tengas Géminis en el Ascendente, o la Luna en dicho Signo si tu madre te dio el pecho en la cocina entre plato y plato.
O Mercurio en cúspide de una Casa, o en la Casa 1, o varios Planetas en el signo Géminis.
El hablar es algo muy familiar para ti —nunca mejor dicho— con lo que tu Mercurio está más desarrollado que otros Planetas, que otras facetas de ti mismo.
¿Qué sucede entonces con la búsqueda del silencio?
¿Cómo se encuentra Neptuno en tu Carta Natal?
Pues como Neptuno detesta el ruido, el pobre estará escondido, inhibido, ignorado, incluso independientemente de la posición que tenga.
¡Estos juegos explican nuestra dinámica psíquica!
…
Este es un ejemplo, pero cada uno tenemos el nuestro, hecho de nuestra familia y de nuestra Carta Natal.
Interesante es detenernos en esto y preguntarnos qué Planetas activaron nuestra familia, a qué partes de nuestra Carta Natal alentaron más. Esto es Astrología terapéutica y transpersonal.
c) Otra clave psicológica: las polaridades y los Aspectos
Ocurre también otro fenómeno que podemos explicar a través de la Astrología.
¿A que en tu Carta Natal aparecen líneas de color rojo?
Esos aspectos de cuadratura y oposición a menudo reflejan tensiones entre Planetas.
Quizá tu primo, ese primo que era tan bueno y que a los 16 años hizo saltar por los aires la imagen de su familia, tenía una oposición de esas que cuando las ves dices «No sé qué significará pero aquí hay algo».
Las oposiciones son como bandazos, durante un tiempo estás en un lugar, en un extremo, en un polo, y en un momento dado, ¡zas!, nos vamos al otro. El primo.
Las polaridades y los Aspectos (conjunciones, cuadraturas, oposiciones, sextiles, trígonos, semicuadraturas, sesquicuadraturas, etc) son un tema fascinante, con infinidad de matices, y que una vez más explican cómo somos y cómo actuamos, haciendo que el conocimiento de la psique sea más accesible.
d) El juego de la proyección
Otro fenómenos muy conocido en el mundo de la Psicología.
Eso que tengo te lo pongo a ti, te lo proyecto.
En Astrología, a través del mapa natal, es fácil detectarlo o imaginar dónde se produce.
Hay Planetas como Venus o Neptuno, y Casas como la 7, a las que les gusta especialmente jugar a la proyección.
Estamos preparando un artículo que hablará de la proyección próximamente.
Nuevamente, Psicología y Astrología van de la mano.
e) Los Planetas en su Signo y Casa: nuestra base psíquica
Y llegamos a algo básico y trascendental, el profundo significado de cada posición astrológica en la Carta Natal.
Hemos visto muchos casos en el blog, por ejemplo:
- Venus en Piscis. Significado, interpretación y aprendizaje terapéutico
- Saturno en Casa 5 y cómo afecta a la autoestima
El significado de un Planeta en un Signo no es algo tan simple como una frase y ya está.
Cada combinación esconde toda una dinámica psíquica increíble y que a menudo pasa por alto, de ahí la importancia de aprender bien Astrología Básica, de conocer como pez en el agua las bases de todo el puzzle: Elementos, Signos, Planetas, Casas, Lunas, Ascendentes, etc.
Cada una de estas posiciones tiene vida, es decir, tiene potencial de crecimiento y va cambiando con el tiempo.
Un Marte en Tauro para un niño no es lo mismo que para un adulto. Y a su vez, ese Marte en Tauro lo podemos trabajar y elevar vibracionalmente para que opere en favor del Ser.
Esto es lo que llamamos Desarrollo Personal y Transpersonal, que los Planetas en sus Signos y Casas estén felices y contentos.
La psique al desnudo a través de la Astrología
Hemos visto algunas claves astrológicas que permiten entender lo que antes no entendíamos.
Conocerse es todo un reto, porque conocerse es entrar en los recovecos de la Psique, y eso requiere vivir un proceso de transformación.
Emprender este camino nos lleva Comprender, desarrollando consciencia.
No se trata de saber lo que uno conseguirá, sino de integrar lo que uno va consiguiendo. Lo importante no es la meta, sino el camino.
¿Percibes cómo la Astrología nos ayuda a explicar las complejidades de la psique (cómo somos, por qué hacemos lo que hacemos, los cambios, etc)?
¿No sería deseable que dentro de la carrera de Psicología hubiese una asignatura llamada Astrología?
De todas formas, no pasa nada, todos podemos aprender Astrología en cualquier momento, está ahí, al alcance de nuestra mano, solo se necesita verdadero interés por Conocer-se.
Y en ese Conocer-se se van disolviendo esos problemas cotidianos que a menudo nos nublan la vista y nos distraen en el inevitable camino de la Autorrealización.
José Ignacio Marina
Psicoterapeuta y Astrólogo Transpersonal
Me encantó! Me identifico en esa lucha constante llamada cambio.
Gracias, Isbel, un abrazo!
Gracias Jose Ignacio ,me quedo clarito¡¡,también me identifico con todo ese proceso.
Gracias, Graciela, la psique… Un abrazo!
Wow, buenísimo artículo, me encantó.
Pues…, yo tengo a Géminis en el Asc., mi Sol es Géminis pero en la Ca 12, mi Mercurio en la Ca 12 haciéndole oposición a mi Neptuno en Ca 6, (Jun.10/70, 6:01 am). Qué ocurre con estas posiciones??, Ahora de adulta, le huyo al bullicio, me gusta más la soledad, de hecho vivo sola y me siento feliz de ello. De niña a pesar que no me molestaba tanto la bulla, el estar entre la gente, siempre hubo momentos en que me apartaba y buscaba momento en soledad.
Estamos cambiando cada instante, esa es la verdad, los planetas rápidos se mueven montones con el pasar de la horas, de los días, en cambio los planetas lentos, se demoran meses, años en moverse entre grados, por esto en Astrología se habla de los ciclos de Saturno, de Júpiter y los cambios que conlleva cada ciclo de estos, no nos alcanza la vida para ver un ciclo de Plutón.
También estoy de acuerdo, a los Psicólogos debieran enseñarles paralelamente sobre astrología en sus carreras, tendrían una herramienta valiosa para aplicar tratamientos a sus pacientes, a veces, la solución no está dentro de tanta teoría, sino dentro de lo sutil.
Un abrazo,
Gracias por tu comentario, Margarita.
Todo está en movimiento y en constante transformación, inclusive nosotros!
Un abrazo.
Buenísimo el post, me resonó muchísimo! Deseando aprender más y más.
Gracias! 🤗❤️
Gracias, Delia, un abrazo!
<3 gracias por compartir sabiduría <3
Gracias, Alma Rosa, un abrazo!
Gran post, y si, siendo consciente del cambio…bienvenido sea
Gracias, Manuel, el cambio es inherente a la vida y al ser humano!
Un abrazo.
¡ Qué maravilla ! Esto de la Psiquis humana visto desde la astrología me ha fascinado desde niño. Ya en mi familia me tildaban de °más loco que una cabra con balaca» y hoy a mis 64 años me siento como un » loco felíz» Contento de ser quien soy y disfrutando del milagro y el contento de vivir.
Cuántos a lo largo de la historia les llamaron loco por seguir simplemente su camino e investigar terrenos desconocidos. ¡No problem! Esta locura es sinónimo de salud, de estar despiertos, de disfrutar del milagro, como bien dices en tu comentario.
Saludos, Alvaro!